Finalmente por Arauco estamos nosotros los de Tirúa, Cañete, Contulmo y de Concepción los estudiantes mapuche. Por su parte los peñis de Lumaco participaron con su Asociación de Comunidades del sector. En esta reunión se acordó realizar una visita general a los 12 hermanos detenidos, todos en la cárcel de Temuco, esta reunión se desarrolló durante la visita del domingo 21. Se buscó con esta idea coordinar mejor la situación global entre los que están presos y los que se movilizan en el terreno. Un programa quedó establecido para Santiago, visitas a ministerios, Corte de Apelaciones de Santiago y encuentros con parlamentarios, principalmente con la llamada "bancada verde".
Los resultados no han sido buenos, el Gobierno persiste en que hay que establecer responsabilidades en lo que se refiere a la Ley de Seguridad Interior del Estado. Por nuestra parte trabajamos para que exista un desistimiento oficial del gobierno a este propósito.
En lo que se refiere a la defensa jurídica de los detenidos, ayer, 24 de diciembre, se dejó en libertad a uno de ellos, Martínez Huilcaleo de Lumaco, un muchacho de 19 años. Pero 11 de ellos siguen en manos del Ministro en Visita (Juez designado) que no los ha condenado pero los mantiene en detención preventiva ya que son considerados como "elementos peligrosos para la sociedad", según las propias declaraciones del Juez a los medios de prensa. La liberación de Martínez Huilcaleo fue considerado como un primer signo del Gobierno de que hay un deseo de superar la crisis.
Considerando estos elementos, los 11 detenidos restantes, cuentan con un cuerpo de abogados entre los cuales están Celedón, Caucoto y uno de Amnistía Internacional. Esperamos de que puedan preparar una nueva defensa para sacar a esta gente lo más rápido que se pueda, pues muchos de ellos tienen familia y eso, en el terreno, pesa.
Por otro lado las cosas se complicaron en Santiago ya que Rita Cona y José Mila, que habían sido detenidos mientras manifestaban por los hechos de Lumaco, iniciaron una huelga de hambre, lo que significa que hay que hacer nuevas gestiones y trámites a nivel jurídico, pues a los dos se les quiere pasar a la fiscalía militar por agresión hacia Carabineros en la vía pública. Junto a eso, hay unas 10 personas que están siendo buscadas y la policía no ha logrado detener. Hay allanamientos en sus casas y en las de sus familiares; también se intimida a los parientes y amigos. Esto recuerda los años mas negros de la dictadura militar.
En el terreno la extrema tensión ha decaído un poco, hay menos presencia policial, pero la empresa forestal sigue sacando madera en caravanas de camiones. La protección policial está asegurada por el Cuerpo de Carabineros pero no usan sus propios vehículos sino los de la empresa Forestal Arauco.
En los diarios nacionales la prensa continua a informar y asegura que
el problema de los mapuche es un hecho nacional, que lo de Lumaco es sólo
una pequeña muestra de lo que podría pasar si la situación
de marginalidad y de abandono de los mapuche continúa.