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El regreso del Presidente Ricardo
Lagos desde México estuvo marcado por el anuncio del nuevo subsecretario
de Mideplan, como coordinador ejecutivo de Políticas y Programas
Indígenas, por el reimpulso a la modificación constitucional
de reconocimiento de los pueblos originarios, en relación a la ratificación
del convenio 169 de la OIT, y por el anuncio de que se hará entrega
-en los próximos días- de 130 millones de dólares
por parte del BID, para proyectos de desarrollo en comunidades indígenas.
El crear las condiciones necesarias
para que el Gobierno Regional tenga las herramientas de diálogo
pertinentes, sin duda, depende del nivel central. Pero no es menos cierto
que -en lo referido a la búsqueda de soluciones de negociación,
de determinar relevancias, desarrollo productivo, destinación de
recursos fiscales, de aplicar políticas de manejo, de diálogo
y, por último, generar empatía con quienes viven el problema
en carne propia-, es el Gobierno Regional el que debe buscar sus propias
soluciones, enfrentar sus problemas y buscar posibles salidas a un túnel
que, a veces, parece estar bloqueado por los desencuentros.
El intendente, Ramiro Pizarro, citó
a diversos representantes del escenario social de La Araucanía -obispado,
universidades, organizaciones sociales, económicas, comunicacionales,
entre otras-, a una reunión tendente a exponer opiniones, criterios
y propuestas no sólo de solución al tema mapuche, sino que
a una gama de factores que han arrastrado a La Araucanía hasta el
fondo de un pozo oscuro.
En la oportunidad la totalidad de
los integrantes de esta sorpresiva "mesa de trabajo" reconocieron la necesidad
de buscar un consenso regional para enfrentar la negra situación
de La Araucanía.
La región más pobre
del país, con mayor cesantía, con menos educación,
con menos industrias, con menos desarrollo social y con menos salud, no
sólo sostiene el tema indígena. Las causas multifactoriales
de su situación obedecen a un histórico divorcio entre los
bloques que hoy chocan.
La mecha ya se encendió y
la opinión pública cuenta con la luz para observar la realidad.
El conflicto, sin duda, es una gran oportunidad para identificar errores,
falencias y fallas en el funcionamiento de algunos servicios públicos
y privados. Esta situación permitirá plantear una política
de desarrollo más agresiva y más consensuada entre las partes,
a las cuales no les queda más remedio que remar para el mismo lado.
El parto duró más de
500 años. Mas vale tarde que nunca dicen los optimistas. Lo cierto
es que tanto el intendente, Ramiro Pizarro, como el alcalde de Temuco,
René Saffirio pensaron y actuaron en forma idéntica, al reunir
a gremios, universidades y entes pensantes para determinar, en el plano
regional, las medidas a tomar para sacar del pantano a La Araucanía
que se hunde.
Más allá del número
de reuniones que se haga, o de quién las haga, lo importante es
apreciar que estos actores sociales rechazan el estatismo, mutismo y todos
los "ismos" que ayuden a mantener a La Araucanía empantanada. Se
reunieron y acordaron buscar salidas y tomar, de una vez y por todas, el
destino de la región en sus propias manos; asumir la responsabilidad
y no dejarse llevar nunca más por la marea que dirige el nivel central,
acorde a las necesidades nacionales y a enfoques capitalinos.
Las recetas preparadas desde Santiago
no han sido efectivas en lo práctico. Cinco cambios de dirección
en la Conadi, vacíos en la política indígena, entre
otras, han conformado una rápida carrera que cayó estrepitosamente
contra el duro cemento, la realidad.
Resta tomar soluciones reales y viables,
desde el lugar que se ocupa, desde el interior del escenario, con perspectiva
social, económica, racial, laboral y sociológica propia de
La Araucanía.
El riesgo de continuar dando palos
de ciego y de mantener "diálogos entre sordos" disminuye a medida
que son los propios habitantes de la región los que buscan el camino
de salida. La tolerancia, el autoconocimiento, el compromiso social y humano
cobrarán mayor prominencia en esta nueva etapa de la historia de
La Araucanía.
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La Región se pone de pie para superar conflictos
El asumir los problemas desde la región,
donde se involucre el Gobierno Regional y la sociedad civil, es la gran
tarea que tiene la nueva mesa de trabajo, liderada por el intendente, Ramiro
Pizarro.
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Por más de dos horas el intendente, Ramiro
Pizarro, junto a distintos actores sociales de la región, se reunió
ayer en el salón de conferencias de la Intendencia para exponer
sus enfoques y aunar esfuerzos respecto de los múltiples problemas
que aquejan a La Araucanía, los cuales se han visto expuestos con
mayor agudeza durante los últimos meses, por causa del tema mapuche.
Rectores de universidades, el obispo de Temuco,
directores de dos medios de comunicación regionales y representantes
de entidades privadas expusieron su visión sobre el trabajo necesario
en un proceso social que promete estar en el tapete del Gobierno durante
años.
INTENDENTE
Ramiro Pizarro destacó la intención
y predisposición de la sociedad civil de La Araucanía para
asumir los temas que afectan a la región.
"Hay distintas instituciones que quieren participar
con una visión de lo que está ocurriendo, que tienen una
interpretación histórica. Las universidades, las iglesias,
escuelas y gremios. Por supuesto, debemos profundizar el diálogo
con las organizaciones indígenas".
La autoridad regional se mostró satisfecha
con la primera reunión de esta recién nacida mesa de trabajo
y elogió la iniciativa del alcalde de Temuco, René Saffirio.
"Me parece estupenda esa iniciativa. Necesitamos ese tipo de aporte de
todos lados. La Araucanía se compone de muchos actores regionales
que tienen reflexión propia, de los cuales necesitamos una opinión".
"Esta crisis puede ser una oportunidad para la
región, ya que en la medida en que nos ordenemos, nuestra región
podrá recibir una atención más preferente por parte
del nivel central. Las expectativas están en que se responda con
mayores recursos y con mayores niveles de inversión para paliar
la pobreza que es parte del conflicto que vivimos".
"La Araucanía está reaccionando frente
a la visión que tiene el país de nosotros, pero en esa visión
no está nuestra propuesta. Si no se revierte aquello, siempre seremos
una región víctima del centralismo, estudiada y analizada
desde Santiago", dijo Pizarro.
OBISPO
El obispo de la Novena Región, Manuel Camilo
Vial, informó que durante la reunión se discutió sobre
el desarrollo integral de La Araucanía. "Tenemos el desafío
de hacer grande esta región. Vamos a promover un diálogo
más masivo con las universidades, los gremios, las iglesias, organizaciones
sociales, entre otros", expuso el sacerdote, con el fin de aunar esfuerzos
para plantear medidas y soluciones viables y concretas.
Vial no descartó la participación
de grupos indígenas en esta mesa de trabajo, los cuales, según
el obispo, podrán formar un grupo de reflexión para abordar
los problemas que los afectan. "Pero cuando entramos al diálogo,
hay que olvidar todo tipo de violencia. Aquí vamos a conversar los
problemas y a individualizarlos", opinó.
Al ser consultado sobre los dichos del dirigente
mapuche, José Naín, quien acusó al obispo de avalar
el genocidio al expresar -durante la misa de la Fiesta Patronal- que los
encapuchados son terroristas, Vial negó que sus opiniones pudieran
traducirse en eso. "Si empiezan a quemar los camiones, a apedrear a las
personas, se empieza a crear un clima de terror, de susto, hablamos de
terrorismo. Hay que saber usar las palabras (...). Naín no sabe
expresarse, son dirigentes irresponsables".
CAMILO SALVO
El integrante de la comisión de esta mesa
de trabajo, Camilo Salvo, destacó la importancia, alcances y profundidad
de esta reunión.
"La iniciativa del intendente (...) merece la aprobación
de toda la comunidad, como también la del alcalde Saffirio, las
cuales son coincidentes y que demuestran que nuestras autoridades tienen
percepciones comunes".
"Esta no es una comisión ni iniciativa más.
La región tocó fondo en todas sus actividades, inversión,
producción, salud, extrema pobreza, delincuencia, etcétera.
Llegamos a la conclusión que la región unida debe enfrentar
el problema con procedimientos extraordinarios, en que se considera lo
que hay, pero se reconoce que todos los actores aporten lo necesario para
elaborar un proyecto que permita el desarrollo y crecimiento de la región".
"Vamos a elaborar una pauta de trabajo y a determinar
quiénes más van a ser convocados para elaborar el proyecto.
Pretendemos un trato preferencial en inversión pública o
reconversión en el sector agrícola. Nadie tiene interés
en quedarse en esta región por las condiciones en que se vive. Con
esta iniciativa, el intendente Pizarro recupera los últimos cuatro
años que perdimos en iniciativas de desarrollo en la región".
AMRA
El presidente de la Asociación de Municipalidades
de la Región (Amra), Pablo Sola, expuso que es necesario hacer un
diagnóstico efectivo de La Araucanía. "A esta reunión
faltó mucha gente que esperamos se adhieran en las próximas
reuniones. Desde la región somos capaces de crear soluciones. Represento
a los 31 municipios de la región y estoy presto a dar a conocer
la postura de todos los alcaldes para apoyar esta iniciativa que, sin duda,
es un gran aporte para el proceso que estamos viviendo".
LOS FEDERALES
Diego Benavente, secretario ejecutivo del movimiento
regionalista "Los Federales", destacó la postura de quienes integraron
la mesa de trabajo. "Es urgente que surja un consenso nacional. Todos estamos
con los deseos de lograr algo y de exponer nuestros enfoques. Existen grandes
desafíos en la sociedad regional. Se necesita más participación
de todos los actores regionales, más eficiencia en la acción
y más consenso entre las partes".
Benavente dijo que el tema mapuche no puede ser
postergado del tema país y que La Araucanía debe tener una
postura clara frente a este particular. "No debemos aceptar los centralismos.
Nuestros problemas debemos solucionarlos entre todas las personas que viven
e interactúan en la región, no por bloques, unidos. Si estamos
unidos tendremos fuerza en nuestras propuestas. Desde ahora la historia
futura debemos escribirla en conjunto".
UAS
El rector de la Universidad Autónoma del
Sur, Teodoro Ribera, aclaró que el Estado se compone de entidades
públicas y privadas, de autoridades y población civil. "La
problemática indígena es un tema de Estado que requiere un
aporte de las organizaciones públicas y civiles. No es sólo
un problema de Gobierno o de parlamentarios".
"La región tiene que ser capaz de hacer,
de este problema, un aporte de desarrollo, para lo cual hay que poner fin
a políticas aisladas, con el fin de idear y definir cuál
es el modelo de desarrollo y sociedad que queremos".
"Hay políticas de segregación o asimilación
racial, yo estoy de acuerdo con la integración y con la capacidad
de conservar el molde cultural. Las políticas que se definan serán
parte de una estrategia para implementar el desarrollo".
"Después de 10 años de una política
indígena, no se ha solucionado el fondo del problema. Hoy existe
pobreza rural, unida a expectativas imposibles de cumplir, lo que incrementa
una resistencia al ordenamiento establecido".
Por Silvia Sánchez R.
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