La otra cara de Lumaco
La actividad forestal ha sido constantemente
criticada por campesinos mapuches de Lumaco, como causante de la sequía
que los afecta. Los datos técnicos son confusos.
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Lejos de su figuración pública por
las movilizaciones mapuches, la sequía de Lumaco es poco conocida
(pese a la lluvia). ¿Causas? Para muchos es la forestación
exótica, cuestión que los expertos prefieren no afirmar categóricamente.
Coincidencia o no, la experiencia de las comunidades indica que con la
tala de estos bosques, las fuentes de agua lentamente están resurgiendo
y con ello las esperanzas de muchos mapuches.
La comuna de Lumaco se ha hecho internacionalmente
conocida por ser una de las zonas de movilización mapuche en los
últimos años. Sin embargo los problemas que las comunidades
deben enfrentar no sólo se relacionan con la falta de tierra, sino
que -cada vez con más fuerza- por la falta de agua.
En la escuela del sector Quetrahue, cercana a Lumaco,
los escolares asisten a clases con botellas de agua, pues el pozo que los
proveía hace tiempo se secó. En Reñico Grande, muchas
vertientes y esteros desaparecieron, y los que quedan apenas vislumbran
pequeñas salidas de agua. En el sector alto, profundas depresiones
en el suelo delatan que algún día existió un grueso
caudal. Hoy, lo más semejante a tal paisaje podría ser lo
que conocemos como la superficie lunar.
La realidad que hoy vive Lumaco es desconocida
por muchos en nuestra región, incluso para algunas autoridades.
"Esta falta de agua nos coarta nuestra forma de vida. Lo más grave
es que su causa no tiene tanto que ver con cambios climáticos, pues
mayoritariamente este problema está causado por la plantación
de especies exóticas en lugar del bosque nativo", afirma un dirigente
mapuche del sector.
ESCUELA
Uno de los casos más graves, ya que afecta
la seguridad sanitaria de los niños, se da en la escuela de Quetrahue,
cercana a Lumaco. Los pozos hace tiempo ya están secos y esta crítica
situación los ha obligado a tomar medidas de emergencia. "Hoy los
niños deben concurrir a la escuela con botellas de agua. Además
del riesgo sanitario, esto representa para ellos un gran esfuerzo, ya que
en la mayoría de sus casas también están sufriendo
de este problema", afirma el director de la escuela.
En Reñico Grande, a 6 kilómetros
del camino Lumaco - Traiguén, al interior del Fundo Santa Clara,
Pedro Llanquinao, presidente de la comunidad, relata que históricamente
existió un caudal que se secó. Tras la tala del bosque el
caudal reapareció como una pequeña vertiente, pero la comunidad
teme que vuelva a desaparecer con la reforestación exótica.
Lo mismo ocurre con el estero que se ubica en el sector alto, un lugar
estratégico para los mapuches, ya que constituía un lugar
ceremonial de descanso y petición para un buen viaje. "Cuando esto
se secó sentimos una impotencia tan grande que, creo, afectó
nuestra salud. Esto trajo como consecuencia que se secara el canelo, nuestro
árbol sagrado. Si no hay canelo, se empieza a acabar nuestra espiritualidad,
un hecho muy grave que no miden los impactos ambientales", afirma Alfonso
Reimán.
MEDICINA TRADICIONAL
También apuntando a la espiritualidad
mapuche, la machi Teresa Painequeo afirma que la pérdida de fuentes
de agua por la actividad forestal está provocando la desaparición
de las hierbas medicinales. "Muchas hierbas que antes se podían
encontrar fácilmente en la zona. Hoy, para usarlas en tratamientos,
hay que ir a buscarlas muy lejos de nuestra comunidad", comenta.
Según el documento "Plantaciones forestales
y comunidades mapuches", elaborado por el Observatorio Latinoamericano
de Conflictos Ambientales, Olca, la carencia de agua y la desaparición
de las especies nativas -de uso principalmente ceremonial y medicinal-,
ha producido serios impactos en la salud humana de los lugareños,
involucrando aspectos físicos y sicológicos, pues los individuos
se ven afectados en su interioridad por los cambios producidos.
"Las plantaciones forestales y la actividad empresarial
realizada en torno a ella, tienen también impactos culturales en
las comunidades mapuches. Esto es otra dimensión del problema, en
donde el efecto ambiental físico detona en un cambio de comportamiento
sociocultural, y por ende en una forma distinta de vivir la vida en las
comunidades", enfatizan los expertos de Olca.
Causas
Para los afectados por la sequía en Lumaco,
unánimemente ésta es causada por la gran expansión
de las forestales y su consiguiente forestación con especies exóticas.
Sin embargo, las investigaciones que hasta el momento existen no son categóricas,
tanto con los que defienden esta teoría, como con los que sostienen
todo lo contrario.
Según la publicación de Olca, "las
empresas forestales, y quienes defienden el modelo actual y sus beneficios,
desconocen y dudan de las denuncias efectuadas sobre la contaminación
de las aguas y el agotamiento de este recurso en zonas de plantaciones",
agregando que más que evidencia o datos demostrables, lo que prevalece
en esta postura son las consideraciones económicas de una actividad
rentable en las condiciones actuales para grupos económicos.
Coincidencia o no, la llegada del bosque exótico
ha disminuido considerablemente el agua del sector y con la tala está
comenzando a brotar de nuevo. "Estamos contentos porque fuentes de agua
que habían desaparecido han vuelto a brotar lentamente, pero tememos
que con la reforestación vuelvan a desaparecer", afirma uno de los
dirigentes.
Colaboración: Fundación Instituto
Indígena.
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