POSTULACIÓN
ANTE LA UNESCO:
Nguillatún
y Canto a lo Divino quieren tener brillo mundial
Iván Fredes
IVÁN FREDES
TEMUCO.- "Inche machigean pilán
eymiküen" ("Yo no elegí ser machi. Tú me pusiste"),
reza en mapudungún la machi Hilda Meliqueo, de Palihue, al invocar
a las deidades Kuze, Fucha, Ülcha y Weche, para pedir, ofrecer y agradecer
por su comunidad en el nguillatún, la rogativa religiosa más
trascendente del pueblo mapuche.
La machi es la máxima autoridad
espiritual de los mapuches y en ese rito, después de ofrecer comidas,
bebidas y bailes a sus creadores, siempre tocando su cultrún, cae
en trance y logra comunicarse con sus deidades frente y sobre el Rehue
o altar, para pedir bienaventuranzas a su comunidad.
Aunque no existe un catastro definitivo,
se calcula que en Chile y Argentina existen unas 300 machis y unos tres
mil nguillatués (sitios sagrados donde se realiza el nguillatún),
que en primavera y otoño, principalmente, convocan a los indígenas
en ceremoniales de acción de gracia al aire libre.
Este ritual ancestral, exclusivo de
los mapuches de Chile (un millón) y de Argentina (180 mil) será
postulado por ambos países - en octubre próximo- al Fondo
de las Naciones Unidas para la Educación y la Cultura (Unesco).
Simultáneamente, el Gobierno
chileno también postulará la tradición oral del Canto
a lo Divino, una rogativa religiosa u oración campesina recitada
poéticamente en décimas, que tiene características
propias y únicas en el mundo.
Las próximas proclamaciones
se harán públicas el próximo año.
Los cantores a lo divino -se calcula
existen un centenar de cultores- manifiestan su devoción religiosa
en el campo, donde acompañados de guitarras cantan en versos una
reescritura propia, desde la perspectiva rural, de las Sagradas Escrituras.
Ambas expresiones ancestrales, con
identidad propia y exclusiva, con una tradición de más de
500 años, pretenden ser reconocidas y preservadas como tesoros u
obras maestras de la humanidad.
Sobre el nguillatún, el investigador
de la cosmovisión mapuche Juan Ñanculef destaca la importancia
de que ese rito ancentral sea reconocido como patrimonio de la humanidad,
dado que a través de esa ceremonia los indígenas reconstituyen
su mundo y manifiestan de manera sintética su cultura.
Una opinión distinta tiene el
polémico líder del Consejo de Todas las Tierras, Aucán
Huilcamán, quien rechaza tal postulación y considera que
la iniciativa chileno argentina intenta apropiarse del conocimiento colectivo
de esa etnia.
Elegidos
Las primeras 19 obras maestras del
patrimonio oral e inmaterial aprobadas por la Unesco son: Carnaval de Oruro
(Bolivia), ópera Kunqu (China), los Cantos Gregorianos (Georgia),
crucifijos artesanales (Lituania), teatro sánscrito (India), teatro
Nogatu (Japón), música ritual de Jongmyo (Corea), cantos
de Ifugao (Filipinas), cultura de Boysun (Uzbekistán), Misterio
de Elche (España), ópera de marionetas de Sicilia (Italia),
cultura de Semeiskie (Rusia), cultural Plaza el-Fna Djamaa (Marruecos),
cultura de Gafuna (Belice), Fraternidad del Espíritu Santo (Rep.
Dominicana), pueblo Zapara (Ecuador-Perú), el patrimonio oral de
Gelede (Benin), trompetas transversales deTagbana (Costa de Marfil) y cultura
de Sosso Bala (Guinea).
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